La Barqueta: Rumbo A La Recuperación De Tradiciones
Autor: X. M. T.

José Bayona, con su compañero de representación, sostiene la imagen de la Virgen en el drama de la Barqueta
Al hacer la representación del Hallazgo de la virgen, Pedro María Orts puso como condición que yo interpretase el papel de mi antepasado, cuenta José Bayona Vives para justificar su obligado protagonismo en ese drama que desde hace 14 años revive, como pórtico de las Fiestas Patronales, la historia por la que unos marinos benidormenses al arriesgarse a remolcar un londro a la deriva, ganaron para el pueblo uno de sus más preciados tesoros: la Virgen del Naufragio.
La conservación y mejora de este acto festivo que entronca con lo más vital del teatro popular constituye el fin primero de “La Barqueta” una asociación cultural y recreativa que preside Bayona. Ese objetivo se complementará con el de velar por la restauración de las tradiciones perdidas y colaborar con todos cuantos se muevan en este campo de las fiestas y del espíritu local.
Al hablar de los benidormenses no nos referimos en nuestros estatutos sólo a los nativos de aquí, sino a todos cuantos estimen Benidorm, cuyas tradiciones pueden convivir en su mayoría con la s innovaciones aportadas por la transformación.
Haciendo un somero repaso de sus actividades, La Barqueta, aprobada el pasado diciembre, tiene ya una larga trayectoria que se inició en marzo, cuando se celebraba el 245 aniversario de la llegada de la Virgen. Unos sainetes en valenciano y la restauración de las carreras de aros fueron la primera salida pública de la asociación.
El acierto no pudo ser mayor. Los aros rodaron con maestría por las calles Martínez Alejos y los niños y jóvenes envidiaron el pulso de los viejos maestros en esa habilidad. En mayo la fiesta de la Cruz dio la oportunidad para nuevos sainetes, y de más impacto ha resultado la intervención de La Barqueta para devolver a la procesión del Corpus su viejo esplendor con el monumento de la Alameda.
Hemos tenido siempre una inmejorable acogida, reconoce Pepe Bayona que añade:” Si no tenemos más socios es por falta de tiempo para proponer a la gente nuevos objetivos”
También les falta un local que haga de sede y hogar a la vez de museo. “Es un tema que nos preocupa, pues pretendemos formar un patrimonio para Benidorm. De hecho, ya estamos reuniendo algunas cosas, documentos, libros… También tenemos algún trasto que otro, pero nos falta donde colocarlo”. Es una necesidad que, sin embargo, no quieren subordinar a su independencia: se declaran apolíticos y aconfesionales, hasta el punto de que hay un mahometano en la asociación.
Lo que importa es Benidorm, su espíritu tradicional conservado vivo y pujante. No puede haber una causa más digna.